Cerca de 250 vecinos de todas las edades de Quer participaron en la celebración de la Noche de San Juan setera. A partir de las nueve de la noche, un grupo de quince voluntarios comenzó a preparar la parrilla para la sardinada que el pueblo degustó después en la misma Plaza Mayor. Se asaron y comieron casi 300.
La lluvia y las tormentas, que amenazaban el Corredor del Henares, al final no hicieron acto de presencia en Quer. Como novedad este año, y al mismo tiempo que sardinas y queimada iban tomando forma, los niños de la Escuela Municipal de Taekwondo, así como las chicas de la de Baile hicieron gala de sus progresos, justo antes de que los seteros compartieran la cena. Todos aplaudieron embelesados las evoluciones de los niños y niñas.
Después de la cena, los seteros tomaron un chocolatito caliente con rosquillas y bollos, que a esa hora apetecían, puesto que la temperatura había bajado por debajo de los veinte grados.
Un poco antes de la medianoche se encendió la hoguera, siempre sin lluvia. Una vez hubo ascuas, muchos seteros, medio centenar, se atrevieron a saltarla para ahuyentar los malos espíritus. Otros tantos pidieron sus deseos en la entrada del verano sobre la hoguera de San Juan.
También hubo queimada y conjuro. La Asociación de Mujeres de Quer colabora con el Ayuntamiento en la organización de la actividad.